“La 'triple corona' del tratamiento de las arritmias cardíacas más comunes y más letales es la alimentación externa, la estimulación inalámbrica y, de lejos y lo más importante, la desfibrilación cardíaca que no solo es indolora sino que en realidad es imperceptible para el paciente. Nuestra tecnología pone de relieve la notable posibilidad de lograr este objetivo”.
–Mehdi Razavi, MD, Director, Centro de Investigación e Innovaciones Clínicas de Electrofisiología
Los médicos e ingenieros de THI están comprometidos con el desarrollo de nuevos dispositivos de marcapasos que eliminarán la necesidad de baterías y cables y, lo que es más importante, reducirán el dolor de las descargas eléctricas administradas por un desfibrilador cardíaco implantable.
Dirigido por Mehdi Razavi, MD, Director del Centro de Investigación e Innovaciones Clínicas de Elecrofisiología, el equipo está realizando algunas de las investigaciones más innovadoras actualmente en curso para pacientes con arritmias cardíacas. Este trabajo implica la colaboración con instituciones de los EE. UU., incluida la Universidad Rice, la Universidad de California, Los Ángeles (UCLA), la Universidad de Texas-Austin y la Universidad Texas A&M.
El equipo se centra en las innovaciones que mejorarán la calidad de vida de los pacientes. El éxito del equipo se deriva de su enfoque específico en la investigación traslacional que innova en dispositivos y técnicas que se utilizan para detectar, controlar y tratar diversas afecciones cardíacas, en particular las arritmias.
Bajo el liderazgo del Dr. Razavi, la investigación en electrofisiología del THI continúa atrayendo importantes subvenciones y colaboraciones de alto perfil.
Tanto la Society for Biomaterials como la Heart Rhythm Society reconocieron al equipo por sus importantes contribuciones e invitaron al equipo a presentar en las reuniones anuales y compartir los proyectos en curso y de vanguardia en THI.
Progreso hacia marcapasos inalámbricos con desfibrilador sin descargas
Los marcapasos que se usan hoy en día se basan en señales eléctricas para incitar al corazón a mantener un latido constante. Estos dispositivos se implantan debajo de la piel, donde los cirujanos pueden reemplazar periódicamente sus baterías a bordo con una cirugía menor. Al estar ubicados lejos del corazón, los marcapasos le transmiten sus señales eléctricas a través de cables llamados "derivaciones". Algunos de los problemas comunes con este arreglo son las complicaciones relacionadas con los cables, incluido el sangrado y la infección.
El nuevo marcapasos del Dr. Razavi y su equipo reduce estos riesgos al eliminar los cables. Aunque ya existen algunos marcapasos sin cables, sus diseños los limitan a marcar el paso en una sola cámara del corazón; no pueden proporcionar estimulación bicameral o biventricular. Por el contrario, el marcapasos del equipo utiliza microchips sin batería, sin cables y alimentados de forma inalámbrica que se pueden implantar directamente para marcar múltiples puntos dentro o fuera del corazón.
Los pequeños chips en el corazón del sistema tienen menos de cuatro milímetros de ancho y están montados en una placa de circuito que es una fracción del tamaño de un centavo. En las pruebas preclínicas, el equipo demostró que el dispositivo podía ajustar significativamente la frecuencia cardíaca.
En 2018, el equipo alcanzó hitos críticos y completó los estudios de estimulación inalámbrica que aparecen en la portada de la edición de noviembre de la Revista de electrofisiología cardiovascular.
Innovando para hacer que los DAI sean menos dolorosos
Estos pequeños chips pronto podrían mejorar los desfibriladores cardioversores implantables (DCI).
“Usados a menudo para prevenir la muerte cardíaca súbita en pacientes con arritmias potencialmente mortales, los ICD son muy efectivos, pero tienen inconvenientes. En particular, la descarga eléctrica que el dispositivo imparte al corazón cuando pierde el ritmo puede ser muy dolorosa”, dice el Dr. Razavi.
Estos chips no solo podrían reducir el tamaño físico de los ICD, sino que también podrían proporcionar descargas mucho más pequeñas, devolviendo el corazón a su ritmo normal sin que el paciente se dé cuenta.